Existen tres tipos de uniones químicas:
- Unión iónica
- Unión covalente
- Unión metálica
Unión iónica
Es la unión característica entre metales y no metales.
Como, por ejemplo, un átomo de sodio y uno de cloro. Las estructuras electrónicas correspondientes (por niveles) como se puede deducir observando la clasificación periódica en la tabla antes publicada, son:
pare el Na: 2.8.1 para el Cl: 2.8.7
Los elementos del grupo dieciocho más próximos a estos dos elementos son:
el neón (Ne): 2.8 el argón (Ar): 2.8.8
Ambos átomos pueden adquirir, simultáneamente, la estructura electrónica estable, característica de un gas noble, si el átomo de sodio cede un electrón al de cloro.
Pero entonces el átomo de sodio, al perder un electrón, se transforma en un catión sodio (ión Na+), que equivale a decir que se oxida.
El átomo de cloro al captar dicho electrón se transforma en un anión cloruro (ión Cl-). Decimos que se reduce.
La sustancia resultante es el cloruro de sodio.
La unión iónica se produce, por lo tanto, por atracción electrostática entre aniones y cationes.
Los cationes pueden originarse a partir de un átomo metálico, por pérdida de uno o más electrones. Los aniones, a partir de un átomo no metálico, al captar uno o más electrones. En otros términos, la oxidación de un átomo metálico origina un catión y la reducción de un no metal da lugar a la formación de un anión.
Podemos representar la sustancia formada por su fórmula electrónica, también llamada fórmula de Lewis o fórmula punteada.
Para este caso:
El ión cloruro posee, además, los 7 electrones de la última capa y el electrón adicional cedido por el átomo de sodio.
Propiedades de los compuestos iónicos:
- Sólidos a temperatura ambiente
- Altos puntos de fusión y ebullición.
- En estado sólido no son conductores de electricidad, pero fundidos o en solución acuosa son buenos conductores.
- Aspecto cristalino y frágil.
En los próximos post veremos las uniones covalentes y metálicas.
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